Día 1: España - Dubrovnik. Con la mirada puesta en la bella Croacia
Croacia es un país pequeño, pero lleno de contrastes. Las montañas que forman los Alpes Dináricos y la costa del Adriático, con un millar de islas e islotes frente a ella, propician una diversidad de paisajes increíble. Y su ubicación, en la encrucijada entre oriente y occidente, ha dotado al país de una cultura muy personal. Por todo esto, no es de extrañar que Croacia sea uno de los destinos turísticos más visitados de Europa. Durante los próximos ocho días vas a recorrer el territorio del país y conocer a fondo su cultura y su historia.
Hoy deberás presentarte en el aeropuerto dos horas antes de tomar el vuelo que te llevará a Dubrovnik. Esta impresionante ciudad tiene el sobrenombre de “Perla del Adriático” y pronto descubrirás por qué. Denominada antiguamente con el nombre de Ragusa, su casco histórico es un recinto amurallado que surge directamente desde el mar, abrazando toda la ciudad antigua. En su interior, iglesias, palacios y callejuelas reflejan todo el esplendor de su pasado. No te sorprenderá saber que todo el recinto amurallado ha sido declarado Patrimonio de la Humanidad.
Nada más aterrizar en Dubrovnik te llevarán al hotel para hacer el check in. Después, podrás disfrutar de la cena antes de retirarte a descansar.