Viajes y circuitos a Irlanda

Descubre los mejores circuitos y viajes a Irlanda

La mejor selección de Circuitos y Viajes a Irlanda, donde podrás visitar La Catedral de San Patricio, Grafton Street, el Trinity College o St Stephen's Green son algunos de los enclaves más representativos de Dublín, la capital de Irlanda. Pero lo cierto es que todo el país está repleto de lugares que merece la pena visitar con nuestros viajes organizados a Irlanda, como los Acantilados de Moher, la Península de Dingle, la Isla de Achill o el Anillo de Kerry. Y eso sin hablar de las divertidas y hospitalarias ciudades irlandesas, entre las que destacan Cork, Galway, Killarney, Kilkenny, Waterford o Limerick. Esta isla es, a día de hoy, uno de los destinos más recomendables de todo el continente europeo.

CIRCUITOS
27 circuitos
Irlanda: Todo Irlanda

Irlanda, 9 días

Visitando: Dublín, Kerry, Galway e Irlanda del Norte

Déjate sorprender por lo mejor de Irlanda. Adéntrate en la catedral de San Patricio en Dublín, visita el castillo de Bunratty y admira la Calzada del Gigante.

Irlanda: Todo Irlanda II

Irlanda, 8 días

Visitando: Dublín, Kerry, Galway, Irlanda del Norte

Pon rumbo a la maravillosa Irlanda y recorre sus lugares más bellos y pintorescos. Conoce sus bonitas ciudades, pasea por sus encantadores espacios naturales y descubre todos los tesoros que alberga esta isla sin igual.

Irlanda: Paisajes de Irlanda (Vuelos Especiales)

Irlanda, 8 días

Visitando: Dublín-Belfast-Cº Donegal-Cº Galway-Cº Kerry-Dublin

Viajar a Irlanda es una experiencia única e inolvidable que no debes perderte. A continuación, te ofrecemos un impresionante circuito organizado en el que, entre otros lugares fascinantes, visitarás Dublín, Belfast y Kerry.

Irlanda: Lo Mejor de Irlanda y Escocia

Irlanda, 10 días

Visitando: Dublín, Kerry, Galway, Londonderry, Glasgow, Tierras Altas, Edimburgo

Disfruta de un viaje mágico por Escocia e Irlanda. Visitarás la fantástica ciudad de Dublín, navegarás por el famoso Lago Ness y pasearás por la encantadora Edimburgo.

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La Isla Esmeralda nos abre sus puertas

Un pueblo abierto y amable, una alucinante colección de paisajes capaces de quitar el hipo, una sorprendente cultura de la cerveza y unas ciudades preciosas, vibrantes y llenas de construcciones medievales son los elementos que conforman la tarjeta de presentación de Irlanda, la Isla Esmeralda.

En Irlanda no nos darán la bienvenida, nos dirán "¡cien mil veces bienvenido!". Un saludo que refleja, como pocos, el espíritu amistoso de los irlandeses, que son, además, muy sociables. Oscar Wilde llegó a decir: “Somos los más grandes habladores después de los griegos”. Los pubs suelen ser el centro en torno al cual gira la vida social de la comunidad. El clima irlandés es lluvioso y el paisaje, lógicamente, es de color verde esmeralda. Irlanda es un país ideal para recorrerlo despacio, ya sea a pie, en bicicleta, a caballo o en coche. Es un país de paisajes impresionantes, leyendas e historia, como atestiguan sus dólmenes, castillos medievales y antiguas mansiones. Uno de los muchos tesoros que podremos descubrir es este hermoso país es su música folclórica de influencias celtas.
Para los amantes de playas salvajes y acantilados, la escarpada costa del sudoeste será un verdadero paraíso. Recorrer las estrechas carreteras del Anillo de Kerry y las de la Península de Dingle, y admirar los famosos acantilados de Moher, (un espectáculo verdaderamente grandioso), serán experiencias inolvidables. Pero, si queremos tranquilidad, nuestro lugar es la belleza salvaje de la isla de Achill o la de Donegal, un paraíso para surfistas, senderistas y apasionados de la historia.
Existe una gastronomía irlandesa tradicional compuesta, principalmente, por platos muy sencillos, y otra cocina más moderna que podemos encontrar en hoteles y restaurantes. El ingrediente principal de la cocina irlandesa es la patata, que se encuentra en platos típicos como el Colcannon, (patatas, ajo y col), o el Champ, un puré de patatas servidas con cebolla picada. Los pescados más comunes son salmón, bacalao, cigalas y ostras (servidas, a veces, con una Guinness). En Dublín es muy popular el coddle, salchichas de carne de cerdo cocida. Las fish&chips también son muy populares. Los postres irlandeses son deliciosos, especialmente las tartas de queso, zanahoria o manzana.
Dublín, capital de la República de Irlanda y cuna de escritores como Oscar Wilde, James Joyce y Samuel Beckett, es una capital moderna y rica en historia, mezcla de tradiciones gaélicas y una constante adaptación al mundo moderno. Dublín es una ciudad dinámica, divertida, llena de vida, con calles comerciales en el centro, abarrotadas de gente a todas horas y con uno de los ambientes más divertidos de Europa. Una ciudad en la que apetece perderse por el animado centro de la ciudad y por los verdes lugares de sus alrededores, o por sus jardines y disfrutar de agradables veladas tomando una Guinness en cualquiera de las numerosas tabernas y pubs tradicionales.
Los edificios históricos más interesantes de Dublín son la imponente Catedral de San Patricio y el Castillo del siglo XIII. Además de numerosos museos, la capital irlandesa tiene atractivos parques, como St Stephen's Green y el enorme Parque Fénix, donde está el Zoológico. Uno de los lugares emblemáticos de Dublín es el Trinity College, una de las Universidades más famosas de Europa. Pasear por Grafton Street, el área comercial de la ciudad, escuchando a los músicos callejeros es una delicia.
Además de la capital, Irlanda cuenta, con otras ciudades muy interesantes, como, por ejemplo, Galway, un importante puerto en la costa oeste de Irlanda; Cork, una ciudad universitaria en cuya prisión, parecida a un castillo, estuvieron los prisioneros que iban rumbo a Australia y en la que el campanario de la iglesia de Santa Ana es un auténtico símbolo; Killarney, a orillas de Lough Leane, es una de las paradas de la ruta turística “Anillo de Kerry”; Kilkenny y Waterford, ciudades con sabor medieval, con un festival de la comedia muy importante y estupendos pubs; o Limerick, la tercera ciudad de Irlanda, en la que no debemos perdernos el King John’s Castle y el museo de la ciudad.