Viaje a República Checa: Circuito Capitales Imperiales II (Súper Blackfriday)

Día 1: España – Budapest. ¡Llegó el gran día!

Dos horas antes del embarque (recomendable este plazo para realizar con calma los trámites), estarás deseando que el enlace entre aeropuertos sea lo más breve posible. No tardarás mucho en llegar, y en comenzar una gratificante inmersión por tres destacados países de la geografía europea, distinguidos, evocadores, muy especiales.

Tiempo para cenar y descansar en tu habitación. ¡Bienvenido a Budapest, ya solo te queda disfrutar de lugares únicos en todo el mundo!

Día 2: Budapest. Una experiencia inolvidable

Después de desayunar en tu hotel, podrás comenzar una interesante visita panorámica por los enclaves más reconocidos de la capital húngara. Y lo harás a lo grande, ya que el primer destino será la Plaza de los Héroes, dedicada al recuerdo de las tribus magiares (en el centro está situado el Monumento del Milenio, con la representación de los siete fundadores del país. Un excepcional entorno urbano al que se puede llegar por la impresionante Avenida Andrassy, flanqueada por palacios, palacetes y casas señoriales.

También podrás conocer el Parque Municipal, los puentes de las Cadenas, Isabel y Margarita y el Barrio de Buda.
En Buda podrás pasear por sus pintorescas calles, en las que destacan sus edificios neobarrocos, así como por la Iglesia de Matías (el principal templo católico húngaro, que se comenzó a construir en el siglo XIII), el Bastión de los Pescadores (cuenta con unas espectaculares vistas a edificios como el del Parlamento, a la zona de Pest al Danubio)… Un impactante comienzo.

Una vez disfrutado el almuerzo, tendrás dos opciones: o emplear tu tiempo libre como consideres o realizar la excursión Budapest Histórica, que comenzará por la Gran Sinagoga, en torno a la cual establecieron los nazis el gueto judío (es la segunda más grande del mundo, después de la de Nueva York, y en ella destacan sus torres y cúpulas). De ahí, pasarás al Parlamento de Budapest, uno de los edificios más distinguidos de todo el país, espectacular por dentro y por fuera.

En otra de las excursiones opcionales, podrás realizar un recorrido en barco por el Danubio con el atractivo añadido de una Goulash Party, que te permitirá disfrutar de la sabrosa gastronomía húngara, regada por vinos de la tierra, y de un espectáculo folclórico. Toda una experiencia, después de la cual llegará el turno de dormir en la habitación del hotel.

Día 3: Budapest – Viena. De lo mejor de Hungría, de lo mejor de Austria

El día comenzará a lo grande, después de desayunar en tu hotel en Budapest, con una ruta, a través de la denominada Llanura Panónica, hacia Viena. La llanura se denomina así por los tiempos de la ocupación romana y, en todo momento, ofrece unos espectaculares paisajes naturales. Ya en la capital vienesa, podrás disfrutar del almuerzo para, a continuación, emprender una excepcional visita panorámica que te llevará, en primer lugar, a la impresionante Ringstrasse, una avenida de más de cinco kilómetros en la que se agrupan varios de los edificios más importantes y representativos de la ciudad, como el Parlamento, la Ópera, la Iglesia Votiva, museos como los de Historia del Arte y de la Historia Natural, el Ayuntamiento, la Bolsa… Un auténtico despliegue de belleza y majestuosidad urbana.

La visita también te permitirá pasear por el centro histórico de la ciudad, peatonal y construido en torno a la catedral de San Esteban, que podrás visitar: todo un símbolo, comenzada a construir en el siglo XII y que cuenta con una torre principal de 136 metros… pero aún quedará más por descubrir: el Palacio Imperial de Hofburg, Kartner Strase, el Graben (donde se encuentra la Columna de la Peste), en pleno centro… Otro excepcional día en el corazón de Europa que culminará, a tu llegada a Viena, con la cena y el alojamiento.

Día 4: Viena. Delicias vienesas

Viena merece más de un día, y así será en este viaje, ya que podrás disponer de tiempo libre para seguir disfrutando de los encantos de esta gran ciudad. Por ejemplo, podrás pasear por el mundialmente famoso Prater y su Noria gigante, inmortalizados por la película El tercer hombre, o visitar la Torre Giratoria del Danubio, cuya altura, superior a los 250 metros, te permitirá contemplar una magnífica panorámica vienesa. ¿Más opciones?: visitar la Iglesia de San Carlos Borromeo (todo un clásico) o sentarte a tomar algo en cualquiera de sus numerosos y célebres cafés, como el Central, el Landtmann o el Sacher (donde se creó la famosa tarta del mismo nombre).

Tendrás la oportunidad de escoger una visita opcional a uno de los enclaves más destacados de la ciudad (y de todo el país) por su relevancia cultural e histórica: la Ópera, que se inauguró con la representación, en 1869, del Don Giovanni de Mozart. Y, además, habrá tiempo para asombrarte ante la estampa del Palacio de Schönbrunn, el que fuera residencia de verano de la familia imperial, donde vivieron María-Teresa (Sissí) y Francisco-José, que fuera escenario del Tratado de Viena y que acogiera el encuentro entre Kennedy y Krushev, en plena guerra fría.

No se puede pedir más… o sí, ya que podrás disfrutar, si lo deseas (visita opcional), de un concierto con piezas de la tradición musical europea y, por supuesto, los valses más representativos. Solo te quedará descansar en tu alojamiento para estar preparado para el día siguiente: Praga te espera.

Día 5: Viena - Cesky Krumlov - Praga. Un viaje a través del tiempo

La siguiente etapa de este extraordinario viaje te llevará a la Republica Checa, en concreto a Cesky Krumlov, en la región de Bohemia del Sur, Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO, donde almorzarás y disfrutarás de tiempo libre para conocer esta ciudad, considerada entre las más bellas de Centroeuropa (lo que tiene mucho mérito, dada la competencia). Un aspecto de libro, de película, que te sorprenderá aún más al no ser un destino tan promocionado y conocido como otros. Toda una experiencia, que te llevará a la época medieval, además de las reminiscencias renacentistas, barrocas, etc.

Destaca, dominando la ciudad regada por el Moldava, el extraordinario conjunto que forman por el Castillo y la Iglesia gótica de San Vitus. En el primero de los casos, ofrece una espectacular presencia en este privilegiado entorno, con todo tipo de aportaciones arquitectónicas de distintas épocas; en el segundo, sus más de 700 años de historia suponen una excepcional aportación artística a la ciudad. Muy cerca de allí, podrás pasear por calles empedradas, perfectamente conservadas, y en un ambiente de máxima tranquilidad. Una gratificante jornada antiestrés que culminarás con la llegada a la Praga, donde cenarás y te alojarás.

Día 6: Praga. La eterna capital checa

Despertarse en Praga es toda una buena noticia, una grata experiencia que irá en progresión según avance la jornada. Después de desayunar, empezarás una completa visita panorámica que te llevará, en principio, al Barrio Judío, Josefov, uno de los más destacados en todo el mundo: su cementerio, sus calles y sinagogas (entre ellas, la española; la de Staronová, la más antigua de Europa, etc.) serán un magnífico punto de partida.

Tu ruta continuará por la Plaza de la Ciudad Vieja y el Ayuntamiento, así como por las iglesias de San Nicolás y Santa María de Týn, hitos arquitectónicos no solo de la ciudad, sino de todo el país, para después llegar hasta otros enclaves tan importantes como, entre otros, el Puente de Carlos y la Plaza Wenceslao.

Tendrás, después del almuerzo (incluido en la opción Todo incluido) toda la tarde libre para seguir disfrutando de una de las ciudades más apreciadas y visitadas de todo el continente. Y podrás escoger una excursión opcional (incluida en la opción Todo incluido) de la Praga Santa, un excepcional despliegue histórico-artístico que incluye el Castillo de Praga con la Catedral de San Vito y el palacio Real Viejo (allí comenzó la Guerra de los 30 Años), el Callejón de Oro, etc.

Un magnífico cierre de tarde que culminará con una sabrosa cena y el alojamiento en tu hotel.

Día 7: Praga. Unas horas que se fijarán en tu recuerdo

Aún queda mucha Praga por visitar o revisitar, lo que podrás hacer si escoges emplear tu día de tiempo libre. Pero también tendrás la oportunidad, si lo deseas, de escoger una excursión opcional (incluida en la opción Todo incluido) a la ciudad-balneario Karlovy-Vary, toda una referencia en este tipo de enclaves que favorecen la relajación y el descanso.

La ciudad ha sido tan apreciada a lo largo de los siglos que, en el XIX, por ejemplo, atraía a los miembros de la alta sociedad y a personalidades artísticas como Strauss o Beethoven , seducidos por el magnífico entorno natural, la tranquilidad de su vida urbana y ante todo, el sugerente reclamo de las aguas termales. Podrás pasear entre las célebres e incomparables columnatas que flanquean río Teplá, con la oportunidad, después del almuerzo (incluido en la opción Todo incluido) de aprovechar tu tiempo libre para apurar al máximo las bondades de este destino.

Ya en Praga, llegará el turno de disfrutar de la cena (incluida en la opción Todo incluido)y descansar en la habitación de tu hotel.

Día 8: Praga – España. Un magnífico balance

Después de desayunar, tendrás tiempo libre para pasear o conocer algún sitio cercano al hotel, o para comprar algunos recuerdos… en todo caso, unos momentos para despedirte de un excelente destino de viaje, un magnífico cierre de un recorrido que comenzó en Budapest y que se habrá convertido en inolvidable.

Un homenaje a los sentidos entre maravillas urbanas y naturales, una imbatible combinación de ciudades, y de trayectos entre ellas que te habrán permitido, además, viajar por el tiempo. ¡Gracias por acompañarnos, ya queda menos para el próximo viaje!