Día 6: Mandalay - Amarapura - Ava - Mandalay. Una jornada inolvidable
RÉGIMEN
Desayuno y almuerzo
Transporte
Autocar, minibús o van
Visitas
Visita templos y/o pagodas
Paseo en coche de caballos
Te despiertas descansado y con ganas de aprovechar el día y conocer la increíble Mandalay, la capital cultural del país. Después de disfrutar de un exquisito desayuno birmano llega el momento de ponerse las pilas y empezar con la ruta que te espera hoy.
Tu primera parada será increíble, y es que vas a poder admirar el Buda Mahamuni, una de las figuras sagradas más respetadas del país. Tus ojos no sabrán lo que ven, viajero, ya que esta estatua tiene unos cuatro metros de altura y está recubierto por más de una tonelada de oro. Si ésta imagen ya te parece un tesoro en sí, todavía te parecerá más impresionante saber que los fieles van adosando a su cuerpo láminas de este elemento y que su corona está cubierta por piedras preciosas. ¡Una estatua que es toda una joya!
Después de esta interesante visita te dirigirás hacia Amarapura, un pueblo en el que estudian y pasan su día a día más de 1.000 monjes. Es en este enclave de Myanmar donde se encuentra el Puente de U-Bein, construido en el año 1851 sobre el lago Taungthaman. Se trata de una edificación espectacular, ya que está formado por más de 1.000 pilares y tiene una longitud de 1.200 metros. La historia que aguarda también es muy interesante, ya que se construyó con la madera que se rechazaba a la hora de levantar los palacios y templos de Amarapura, un material que también se utilizó para construir las vías del tren.
Cerca de este punto tan característico de Myanmar se encuentra el Monasterio de Mahagandayon, del 1942. Aquí podrás vivir en primera persona cómo es el día a día de los monjes que habitan en esta zona, así como también de las monjas que, aunque residan en el mismo complejo viven en zonas diferentes. Además, la vestimenta de unos y otros también es diferente, ya que ellas van de color rosa y ellos de color rojo. Una de las curiosidades, es que los monjes no pueden cocinar y cada mañana salen del Monasterio descalzos para recoger las ofrendas, en forma de comida, que les traen los lugareños.
Tras esta maravillosa experiencia te espera otra aventura increíble. Te pararás en Ava, antigua capital del imperio birmano entre el siglo XIV y XIX, aunque su nombre original era Ratanapura. Aquí podrás montar en un coche de caballos y descubrirás dos bellos monasterios: el de Me Un Oak Kyaung y el de Bagaya. El primero data del año 1822 y tiene siete alturas. Te va a sorprender su construcción ya que está hecho de ladrillo y piedra y decorado con mosaicos de cristal. Este templo honra a la reina Me Nu, que gobernó entre el año 1819 y 1837 y se hizo con el poder a causa del desinterés de su marido, el rey Bagyidaw.
Como te he comentado, también visitarás el monasterio de Bagaya, construido en el siglo XVI solo con madera de teka. No obstante, fue víctima de un incendio en el año 1821, por lo que se tuvo que volver a construir en un lugar diferente, donde está ahora. Actualmente este templo es un museo, pero también es la escuela de los niños que viven en las aldeas cercanas.
Después de estas interesantes visitas regresarás a Mandalay para disfrutar de la sabrosa comida en uno de sus restaurantes locales. Tras reponer fuerzas te irás hacia la Pagoda Kuthodaw, donde podrás ver el libro más grande del mundo. Después de esta interesante ruta llegará el momento de despedir el día y lo harás de la mejor manera posible, ya que te subirás a la colina de Mandalay Hill para presenciar la mágica puesta de sol de Myanmar.