Día 3: Catania – Siracusa. Entre dos ciudades llenas de magia
RÉGIMEN
Desayuno. Almuerzo.
Transporte
Autocar, minibús o van
Visitas
Panorámica de Catania
Zona arqueológica de Siracusa
Desayuno y visita de Catania, la segunda ciudad más grande de Sicilia después de la capital, repleta de atractivos para el visitante, en un entorno marcado por construcciones realizadas en piedra volcánica. Patrimonio Histórico de la Humanidad, es un ejemplo de reconstrucción, debido a las siete erupciones de su vecino Etna, así como por diversos terremotos a lo largo de la Historia, sobre todo en los siglos XII y XVII. Como otros parajes italianos, supone una mezcla de cultura bizantina, normanda, griega, árabe, española, etc., en una ciudad que acogió la primera universidad siciliana (desde 1434), con calles con encanto y monumentos como su anfiteatro. Podrás, además, visitar, acompañado por un guía local, el Mercado del Pescado (junto al enorme de la Fiera, el principal de la ciudad), justo al lado de la Plaza del Duomo.
Más citas con la historia en entornos excepcionales: viajarás hasta la cercana Siracusa, cuna de Arquímedes y considerada en la Antigüedad como el centro urbano más grande. Un prodigio de vestigios arqueológicos y de espectáculo de la naturaleza en el que destacan el parque arqueológico de Neápolis (que incluye un teatro griego y otro romano), además de las célebres canteras y las gruta Dei Cordari y la de los Capuchinos (origen de la piedra de muchas construcciones autóctonas), la original y bucólica Fuente Aretusa, etc. También podrás visitar el Santuario della Madonna delle Lacrime (una estética muy particular pero, en todo caso, centro de devoción), al lado del Museo Arqueológico. Y de ahí, podrás instalarte en el hotel para, después de almorzar, completar la jornada a lo grande con la visita con guía local de la zona arqueológica y la isla de Ortigia, que se une a Siracusa por un puente y que te sorprenderá con enclaves como el Templo de Minerva o el de Apolo. Después de la cena (incluida en la opción Todo Incluido) y el alojamiento en tu hotel, ya quedará menos para otro gran día en Italia.