Viaje a Costa Rica: Circuito Costa Rica central

Día 1: Madrid - San José - Llano Bonito de Naranjo. ¡Tu aventura comienza ya!

Aquí estás… Mirando tu equipaje con una media sonrisa que sabe a vacaciones. Que sabe a aventura. Que sabe a unos días alucinantes en Costa Rica. Que sí, que hoy te vas. Hazte a la idea. ¡El día ya ha llegado! Cierra tu maleta, haz una última revisión de tu documentación y parte raudo al aeropuerto. Cómo te has organizado bien y llegarás al aeropuerto con bastante tiempo de antelación, podrás facturar tranquilamente, pasar el control y esperar la apertura de la puerta de embarque mientras te comas un refrigerio. Una vez dentro del avión, relájate y disponte a descansar mientras cruzas el charco.

Para los que hayan escogido la opción con traslados: ¡Ya has aterrizado en San José! Lo cierto es que el vuelo se te ha hecho más corto de lo que pensabas. ¿Será porque te has pasado gran parte del trayecto soñando con todo lo que vas a descubrir? Desciendes de tu amigo aéreo, respiras ese aire tropical que comienza a acariciar suavemente tu cara y te diriges hacia tu primer destino: Llano Bonito de Naranjo. La vibrante capital comienza a quedar atrás mientras empiezas a introducirte en un paisaje verde que te da la bienvenida. Introducirse en la provincia de Alajuela, lugar donde se ubica nuestro primer destino, significa dos cosas: la primera es que vas a ser testigo de un escenario natural como nunca antes; la segunda es que vas a conocer el epicentro cafetero de Costa Rica. ¡Si es que casi puedes notar ya el aroma!

Esta zona del país destaca por sus parques nacionales de Arenal y Poás, aunque tu prestarás atención al primero por ser hogar del tercer volcán más activo de Costa Rica, sus pintorescos pueblos rurales donde aprenderás los modos de vida de sus habitantes y la artesanía típica y, en definitiva, por pintar un paisaje tan diferente al occidental que, simplemente, caerás rendido a sus encantos.

Cuando llegues a esta impresionante parcela natural entrarás en tu lodge, dejas el equipaje y te diriges a tu propia suite. Qué… ¿sorprendido? El diseño de este alojamiento está confeccionado de una manera muy especial. La fusión entre naturaleza y cultura se mezcla a la perfección con la esencia cafetera de la zona. Un lugar lleno de encanto perfecto para descansar y prepararte para tu gran aventura.

Para los que hayan escogido la opción con coche de alquiler: Una vez en el aeropuerto tendrás que recoger del coche de alquiler y saldrás en dirección Llano Bonito de Naranjo, para alojarte. El coche dispondrá de GPS y de un móvil (no es un smartphone) con un saldo de 60 minutos para llamadas locales.

Día 2: Llano Bonito de Naranjo. Descubriendo el eje cafetero

Para ambas opciones (traslados/coche de alquiler): Aún no sabes muy bien dónde te encuentras pero lo que sí que tienes claro es que hoy te espera un día maravilloso. Un día en el que vas a dar tus primeros pasos por este fascinante país. ¡Y de qué manera! Miras por la ventana y lo único que ves es naturaleza, cielo azul y más naturaleza. Un cosquilleo te recorre el cuerpo. ¡Qué ganas de empezar a caminar! Así que te vistes con ropa cómoda, te calzas las botas y bajas a saborear un completo desayuno costarricense.

En la provincia de Alajuela disfrutarás de unas impresionantes vistas al Valle Central mientras caminas por un entorno natural que ya comienza a quedarse contigo. El olor tan característico del café te acompaña mientras comienzas a adentrarte en las extensas plantaciones de esta milenaria bebida. Recorrer una auténtica plantación de café es uno de esos placeres que probablemente no olvidarás jamás. Caminar entre sus altas plantas, oler los granos, acariciar sus hojas mientras el sol te abraza. Nada más delicioso para empezar el día que un completo tour por estas maravillas que han protagonizado un antes y un después en el desarrollo socioeconómico del país. Una primera visita llena de magia que, por el momento, te ha dejado con ganas de tomarte ese segundo café matinal.

Después de reponer fuerzas, tienes la oportunidad de sumarte a dos planes. El primero es visitar el pintoresco pueblo de Naranjo, donde entenderás a la perfección la expresión “Pura Vida”. Esta frase que los costarricenses utilizan hasta la saciedad –es probable que ya la hayas escuchado en más de una ocasión- cobra especial protagonismo en esta zona geográfica. ¡Y no es para menos! El optimismo y la alegría de sus habitantes son contagiosos. En una tierra en la que la principal base económica es la agricultura y el cultivo de café inmersos en naturaleza y paisajes únicos, no es de extrañar que los lugareños hayan adoptado una actitud tan positiva ante la vida. ¡Si ya están en el paraíso! Recorriendo sus callecitas, llegarás a una hermosa iglesia de estilo barroco que preside el centro del pueblo. En los alrededores descubrirás restaurantes y bares donde podrás relajarte con una humeante taza de café… ¿Qué ibas a pedir si no? También te recomendamos que pruebes los chicharrones, una delicia muy codiciada entre lugareños y visitantes. ¡Que aproveche!

Si optas por la segunda opción, entonces prepárate para aprender más sobre el delicioso café. Vas a visitar un beneficio de café donde te explicarán datos tan interesantes como los procesos de selección de los granos y su exportación alrededor del mundo. Este producto se introdujo en Costa Rica a finales del siglo XVIII y este país fue pionero en desarrollar el cultivo, factor que cambió la perspectiva económica de la sociedad costarricense. Cuando el territorio consigue la independencia de España en el año 1812, el gobierno comienza a impulsar la industria cafetera iniciando un plan de promoción en el que destacó la construcción de carreteras nuevas para potenciar la exportación marítima al Reino Unido. Poco a poco los cultivos fueron creciendo y el café se convirtió en el único producto que el país exportaba a un gran número de países, promoviendo el desarrollo económico de sus habitantes y ganándose el merecido título de “Grano de Oro”. Hoy en día el café es uno de los productos estrella de Costa Rica, reconocido a nivel mundial.

Vaya día más intenso ¿eh? Con todo lo que has aprendido y visto solo te queda disfrutar de una buena cena y descansar bien para estar cargado de energía.

Día 3: Llano Bonito de Naranjo - Volcán Arenal. Un paisaje de película.

Para los que hayan escogido la opción con traslados: Con una sensación un poco agridulce dices adiós al hermoso escenario del Valle Central. Lo cierto es que para haber sido tu primera parada en Costa Rica, esta parcela natural ha superado con creces tus expectativas. Café, naturaleza, un pueblo, más café… En tus ojos aún distingues las callecitas de Naranjo y la expresión despreocupada de sus habitantes. “Pura Vida”, recuerdas con una media sonrisa. Te acabas el desayuno, coges tu equipaje y comienzas la marcha hacia el volcán Arenal. Un gran gigante que te espera impaciente.

Aunque el camino hacia el volcán Arenal es un contraste constante de paisajes que se funden con el azul del cielo y las nubes, queremos hacerte más liviano el trayecto. Sabemos que estás deseoso de conocer la auténtica esencia de Costa Rica, y por eso mismo vas a parar en dos pueblecitos rurales antes de llegar a tu destino. Cuando llegas al primero, Río Cuarto, lo primero que te sorprende es ese ambiente seco que envuelve a todo el territorio. Las verdes llanuras han quedado atrás para ofrecerte un entorno más árido, que te recuerda a las películas de vaqueros. Y, de hecho, sentirás que estás en una cuando conozcas a sus habitantes. Aunque quizás puedan parecer más tímidos que sus vecinos de Naranjo –a veces dicen que el carácter va con el clima-, te sorprenderá comprobar que la mayoría se desplazan a caballo. ¡Como en las películas! En un paseo por el pueblo conocerás la joya que alberga en sus afueras. Una gran laguna de origen volcánico se abre ante ti y, automáticamente, te enamoras completamente del paisaje. ¿Cómo es posible tal belleza? Entre la austeridad de las casitas y sus calles brilla este gran oasis que cautiva a todo aquel que la visita.

Con esta hermosa estampa aún en la memoria, continúas la marcha hasta Aguas Zarcas, nuestra segunda parada. En este pueblo te encontrarás con varias granjas de aves, ya que la mayor fuente económica de esta parcela es la avicultura. El ambiente tranquilo del pueblo y sus pintorescas callecitas forman el escenario perfecto para lo que viene a continuación: ¡aguas termales! Sí, sí, y al lado de la civilización. Si aún no sabías por qué el pueblo tenía ese nombre, ahora mismo lo acabas de descubrir. Esta zona es famosa por sus aguas termales y sus lagos de origen volcánico, característica que significa que cada vez estás más cerca del gran volcán.
Por fin, después de un día maravilloso visitando estas maravillas rurales, llegas a La Fortuna de San Carlos. La entrada al imponente Volcán Arenal. De hecho, si tienes suerte con el clima, ya podrás observar sus majestuosos cráteres y paredes de piedra desde el pueblo. Este gigante de piedra, aún activo hoy en día, forma un paisaje idílico digno de la más bella postal. Quédate contemplándolo el tiempo que necesites, un volcán no se ve todos los días. Disfruta de la cena y descansa. ¡Mañana vas a conocerlo de cerca!

Para los que hayan escogido la opción con coche de alquiler: Hoy conoceremos el Volcán Arenal, la joda de Costa Rica. Iniciarás camino hacia el norte del país hasta llegar al Parque Nacional Volcán Arenal donde te alojarás.

Día 4 a 5 : Volcán Arenal. La fuerza de la naturaleza te atrapa

Para ambas opciones (traslados/coche de alquiler): Nunca te hubieras imaginado durmiendo a las faldas de un enorme volcán. Y sin embargo aquí estás, a punto de iniciar tu cuarto día de viaje con la misma ilusión que el primero. ¡O incluso más! Lo cierto es que no sabes muy bien qué te vas a encontrar en tu aventura de hoy, pero lo que sí que tienes claro es que vas a aprovechar hasta el último minuto en el escenario en el que te encuentras. Pero primero, desayuna bien. ¡Tienes que estar al máximo!

Hoy vas a empezar tu día disfrutando de un agradable paseo por La Fortuna de San Carlos, el pueblo que te está acogiendo y que está considerado como la entrada al volcán Arenal. ¡Casi nada! Apenas llevas cuatro días en Costa Rica y ya has aprendido que el ritmo tranquilo de vida es frecuente por estos lares, y por eso no te cuesta entablar conversación con los alegres lugareños, ni preguntarles sobre sus modos de vida. En este pueblecito te encontrarás con muestras de artesanía típica y deliciosos tentempiés para ir abordando la mañana de la mejor manera. Uno de los iconos de La Fortuna de San Carlos que te recomendamos encarecidamente que visites es la imponente Catarata de la Fortuna. Ubicada cerca del pueblo, esta catarata es famosa por albergar una caída de agua de 70 metros de altura.

Qué… ¿Ya te han entrado ganas de aventura? Pues lánzate a descubrir las maravillas que encierra el Parque Nacional Arenal. Con una extensión total de 12 hectáreas, este enclave es perfecto para recorrer en un paseo tranquilo por sus verdes senderos. En ellos podrás conocer la abundante fauna que lo habita, como las dantas, las serpientes, los colibríes, las loras y el hermoso quetzal, un ave considerada sagrada por las civilizaciones Maya y Azteca. Además de esta gran representación animal, el Parque Nacional Arenal también cuenta con árboles centenarios de grandes raíces y una abundante flora entre la que destacan el laurel, el níspero, el guayabo de monte, el pilón, los helechos y las bromelias. Caminando hacia la parte más cercana al volcán, bordearás un hermoso embalse que te cautivará. Se trata del Lago Arenal, un embalse artificial que fue creado para promover la energía hidroeléctrica del país. Junto a esta maravilla serás testigo de una de las mejores vistas al volcán Arenal. Con una altura de 1.670 metros, esta gran formación rocosa era considerada como un elemento sagrado por las antiguas tribus. Y no es para menos. Su forma perfecta y sus grandes cráteres lo convierten en todo un icono para todo aquel que lo visita.

Quizás no te habías percatado pero… ¿Sabías que en el parque hay otro volcán? Nada menos que el cerro Chato, un cráter que, aunque no sea tan conocido como su magnífico hermano, no deja de ser interesante. Sobre todo, por la laguna esmeralda que descansa en su cima y que te dibujará un paisaje alternativo sorprendente.

Día 6: Volcán Arenal - Bosque Nuboso de Monteverde

Para los que hayan escogido la opción con traslados: La verdad es que nunca pensaste que despedirte de un volcán te iba a costar tanto. Y ya no solo porque el tiempo parece que corre cada vez más deprisa, sino porque la extrema belleza de sus paredes perfectas, sus cráteres y esos suspiros de vapor que a veces te ha parecido ver, te han enamorado. Lo miras, por última vez, antes de coger tu equipaje y comenzar tu ruta hacia el Bosque Nuboso de Monteverde. Y sientes que, en cierta manera, ya estás más unido con esta tierra.

De camino a la cordillera de Tilarán varias cosas te llamarán la atención. La primera de ellas son los caminitos de tierra que se abrazan con esa vegetación cada vez más y más abundante. Sin duda, te estás adentrando en un recorrido cargado de magia que se quedará para siempre en tu memoria. Los árboles rozan el cielo, las plantas parece que te saludan a tu paso mientras escuchas el murmullo de cientos de conversaciones de aves. Y antes de llegar al bosque aún te espera una sorpresa muy especial. ¡Bienvenido a un exclusivo paseo en barca! Vas a detenerte unas horas en la inmensidad del Lago Arenal para recorrerlo tranquilamente y avistar a algunos miembros de su rica fauna.

Con 30 km de extensión, este embalse abraza las áreas del Parque Nacional Arenal, el Parque Nacional Volcán Tenorio y el Bosque Nuboso de Monteverde. En su perímetro viven especies de aves como el colibrí, el pájaro carpintero, el quetzal, el tucán y el tucancillo, y es habitual ver a gente practicando kayak y surf en su orilla. Este lago fue el resultado de un proyecto de generación de energía hidroeléctrica con el que hoy en día se produce energía para gran parte del país. Como consecuencia de este plan, se inundaron los pueblos rurales de Arenal Viejo y Tronadora.

Ya casi has llegado al bosque, y después de disfrutar de este agradable respiro sobre el embalse comienzas a ascender por las montañas de la cordillera hasta llegar a los 1.300m altura. El Bosque Nuboso de Monteverde posee 10.500 hectáreas de increíble vegetación, selva, fauna y flora que forman una vista espectacular en el visitante. ¿Que cuál es esa característica que lo vuelve tan especial de la que te hablábamos al principio? Una densa neblina que se desplaza lentamente por sus verdes senderos y sus árboles centenarios. Una neblina que te introducirá en un universo mágico. Aunque nos encantaría creer que es fruto del realismo mágico, lo cierto es que este fenómeno tiene una explicación muy sencilla. La condensación del vapor de agua. Al encontrarse a una altura de 1.600m, es habitual que se forme esta niebla que, sin duda, lo convierte en un escenario único.

¡Bienvenido a esta maravilla! Ahora disfruta de la deliciosa gastronomía costarricense y aprovecha para relajarte y descansar. Mañana te espera un día intenso descubriendo la belleza de este misterioso bosque.

Para los que hayan escogido la opción con coche de alquiler: tendrás que dirigirte hacia el Bosque Nuboso de Monteverde. El trayecto hasta llegar a Monteverde te dejará sin palabras, por el camino te encontrarás con pintorescos pueblicitos, paisajes naturales y frondosos bosques amenizan el viaje. Una vez llegados a Monteverde te alojarás.

Día 7: Bosque Nuboso de Monteverde. Recorriendo la selva

Para ambas opciones (traslados/coche de alquiler): Ni tan solo cuando leías sobre él te hubieras imaginado que el Bosque Nuboso de Monteverde te iba a impresionar tanto. Ubicado a 1.600m de altura, esta Reserva Biológica posee una magia especial que engancha a sus visitantes y hace que los lugareños hablen orgullosos de ella. Después de un suculento desayuno en tu alojamiento, te dispones a explorar todos sus secretos.

Lo primero que te llamará la atención al adentrarte en esta inmensa maravilla natural es la gran cantidad de animales y plantas que conviven en ella. El bosque alberga en su interior a más de 400 especies de aves entre las que se encuentra el icónico quetzal, considerado como uno de los emblemas del país por su colorido y abundante plumaje, más de 100 especies de mamíferos, 120 especies de reptiles y más de 3.000 tipos de plantas exóticas. Cuando llegues al bosque tendrás a tu disposición 9 senderos de 13km que te conducirán por todos los rincones accesibles del área. Y si necesitas reponer fuerzas o si quieres conocer su historia, el bosque también ofrece servicios de café restaurante con un variado menú, tienda de regalos y un centro de visitantes.

Declarada Reserva Biológica en el año 1972 para evitar la amenaza de asentamientos, el Bosque Nuboso de Monteverde funciona como un gran pulmón en medio de las montañas. Su frondosidad y su abundante vegetación se mantiene gracias a los vientos húmedos que abrazan la zona y que funcionan como fuente de nutrientes para árboles y plantas. En este punto de ruta quizás te plantees añadir un poco de emoción a tu excursión. ¿Te apetece probar algo diferente? En la reserva se organizan avistamientos de aves, sobre todo del hermoso quetzal de impresionantes colores. Únete a la expedición y siéntete explorador por unas horas.

O, tal vez, prefieras subirte a un caballo y recorrer los senderos del bosque a lomos de este magnífico animal mientras observas toda la grandeza de los árboles. Una manera muy relajada de disfrutar de otra perspectiva de este paraje y detenerte, por ejemplo, en el majestuoso mirador de “La Ventana”. O, si no… ¿te apetece volver a subirte a la adrenalina? En el bosque se organizan tours en canopy en los que volarás entre tirolinas con unas impresionantes vistas panorámicas.

Día 8: Bosque Nuboso – Playa de Manuel Antonio. Bienvenido al Pacífico

Para los que hayan escogido la opción con traslados: Entre preparar la maleta y decir adiós al emblemático Bosque Nuboso de Monteverde no te queda casi tiempo para pensar en todo lo que tienes por delante. Hoy vas a adentrarte en la belleza del Pacífico en estado puro para recorrer, poco a poco y con calma, la magia que rodea a este lado de la costa. Concretamente, hoy nos dirigimos hacia la playa de Manuel Antonio, uno de los iconos naturales de Costa Rica muy popular entre lugareños y visitantes.

Por el camino nos espera un gran descenso. Mientras vemos alejarse al bosque cada vez más el paisaje comienza a cambiar y ya casi podemos sentir el salitre recorriendo nuestro cuerpo. ¡La playa está a la vuelta de la esquina! Y tienes tantas ganas de llegar y probar las cálidas aguas costarricenses que no puedes parar de imaginarte flotando en el Pacífico. A pesar de ser uno de los destinos más turísticos, lo cierto es que tanto Manuel Antonio como sus playas vecinas han sabido mantener esa esencia paradisiaca que las vuelve tan especiales y que nos dejan postales increíbles.

Arena blanca fundiéndose con la vegetación, azul turquesa… La playa de Manuel Antonio es, sin lugar a dudas, la playa más emblemática del Parque Nacional que lleva su mismo nombre. Un extenso arenal protegido que cuando lo visitas supera a tu imaginación. Así que prepara tu bañador, asegúrate de llevar contigo suficiente protección solar y siente el placer de relajarte a orillas del océano. Durante estos días podrás estirarte en la playa, visitar el Parque Nacional Manuel Antonio, conocer las playas vecinas, hacer excursiones en catamarán y practicar deportes acuáticos. Nada mal, ¿verdad?

Para los que hayan escogido la opción con coche de alquiler: llega la hora de descansar, diriguete hacia las impresionantes playas de Manuel Antonio, en la zona norte de la provincia de Puntarenas. Una vez allí te alojarás.

Día 9 a 10 : Playa de Manuel Antonio. Un día para ti en el paraíso

Para ambas opciones (traslados/coche de alquiler): onroneo de las olas meciéndose en la costa. Hoy es el día perfecto para relajarte y mimar tu cuerpo. Después de un abundante desayuno, bañador y protector solar en mano, te diriges hacia la inmensidad de playa de Manuel Antonio. Cuando llegas, el paisaje te envuelve por completo. Arena blanca, aguas cristalinas de un turquesa que se te clava en las retinas, vegetación y palmeras por doquier… ¿Existe algo más bello en este mundo? Parques Nacionales aparte, la respuesta, probablemente, sea no.

Acabas de llegar a este pequeño paraíso y sientes que eres el único habitante de la zona. Casi no hay nadie a tu lado, y por tu cuerpo empieza a serpentear una paz que te sumirá en una sensación de desconexión superior. Estiras la toalla, te pones crema, y los párpados se te van cayendo en un ir y venir de olas, brisa marina y rayos de sol. Pero, ¡un momento! ¿Qué ha sido eso? De repente te das cuenta de que no estás solo. ¡Los monos aulladores han venido a verte! Estos simpáticos animales están acostumbrados a la presencia de humanos, y es habitual verlos saludando a los exploradores que se acercan hasta esta playa. Activo de nuevo, decides levantarte y refrescarte en el océano. Mientras te introduces en sus cristalinas aguas, puedes ver como algunos pececitos vienen a saludarte. ¡Tranquilo! Son totalmente inofensivos. Sus vivos colores te recuerdan que estás en un destino tropical increíble.

Con una sensación de relajación máxima, quizás te apetezca dar un paseo por el hermoso Parque Nacional Manuel Antonio, hogar de esta playa. Sus 682 hectáreas son el refugio perfecto para monos en peligro de extinción y 350 especies de aves entre las que abundan tucanes, pericos, halcones y tangaras. Toma el Sendero Perezoso y piérdete entre verdes senderos, piscinas naturales formadas por agua de mar, vistas indescriptibles y grandes árboles. Un escenario impresionante que te atrapará por completo.

Y ahora… ¿te apetece un divertido paseo en catamarán? Cerca del parque se organizan excursiones en catamarán por la zona donde, en un agradable paseo por el océano en el que podrás observar a los simpáticos delfines y, si tienes suerte, a las espectaculares ballenas migratorias. Además, la excursión incluye tiempo extra para que te sumerjas en el océano y practiques snorkel para descubrir los hermosos fondos marinos de este rincón del Pacífico y los increíbles peces de colores.

Día 11: Manuel Antonio - San José - Madrid

Para los que hayan escogido la opción con traslados: Cierras la maleta, coges toda tu documentación y partes triste rumbo al aeropuerto. Apenas te has despedido de Manuel Antonio y ya sientes que, poco a poco, tu alma se va yendo del país y vuelve a casa. Han sido tantos días de aventuras y relax en la playa que lo cierto es que ahora mismo te cuesta recordarlos. ¡Hasta pronto Costa Rica! Tienes la certeza de que volverás a recorrer sus verdes paisajes en alguna otra ocasión.

Llegas al aeropuerto, facturas, pasas el control y subes al avión. Aún desde el aire este país tiene algo que te engancha y, de repente, recuerdas cómo te lanzabas en canopy a toda velocidad mientras observabas desde las alturas la belleza de su naturaleza. Con ese pensamiento cierras los ojos y te duermes.

Para los que hayan escogido la opción con coche de alquiler: Ha llegado el día de despedirse de Costa Rica. Hay que dirigirse hacia el Aeropuerto Internacional Juan Santamaría de San José, donde se realizará la devolución del coche de alquiler antes de las 14.00 horas. Posteriormente, embarque en el vuelo que nos llevará de regreso a España. Noche a bordo.

Deberán tener en cuenta que el recorrido desde Manuel Antonio hasta el aeropuerto de San José tiene una duración de unas 4 horas y media. La hora de presentación en el aeropuerto debe ser, al menos, 3 horas antes de la salida del vuelo para realizar los trámites migratorios y de embarque.