Hotel de 4 estrellas en Lloret de Mar. Está situado a unos 200 metros de la playa, cerca de la zona comercial y de ocio. Sus instalaciones son cómodas y han sido recientemente renovadas. El hotel cuenta con una piscina exterior y una piscina interior climatizada, programa de animación nocturna y actividades de día. Bar y salón de TV. Parking exterior, plazas limitadas. Acceso WIFI gratuito en las zonas nobles, con coste en las habitaciones. Servicio de comidas en forma de buffet libre. 248 Habitaciones totalmente equipadas conbaño completo, balcón, tv-sat, teléfono, aire acondicionado y caja fuerte de alquiler. Parking exterior, de uso privado para los clientes de los Hoteles Garbí, situado a 200 m de distancia. Plazas limitadas. También dispone de plazas alquiladas en un parking público próximo, por un coste adicional.
Este hotel de categoría media está ubicado en una zona céntrica, en medio del barrio de hoteles de Lloret de Mar. A unos minutos andando está la playa (unos 300 metros). Cerca del hotel podrá encontrar numerosas tiendas y comercios, animados bares y discotecas, restaurantes y servicio de transporte público.
Las acogedoras habitaciones disponen de baño, teléfono de línea directa, televisión vía satélite o por cable, caja fuerte de alquiler, calefacción central y balcón o terraza.
Se aceptan: Visa y Mastercard.
El hotel cuenta con una piscina exterior y una interior, climatizada en los meses de primavera y otoño. Aquasplash Garbi: Gran espacio ajardinado, con zona de juegos para los más pequeños y varios toboganes de hasta 9 metros de altura. Acceso libre para los clientes del los hoteles Garbi de Lloret.
Servicios de desayuno, comida y cena. Todos en forma de Buffet. Las bebidas no están incluidas y deben abonarse directamente en el comedor.
Miniclub: En el Hotel Gran Garbí, a 150 m. Para niños de 3 a 12 años. En servicio de finales de Junio a mitad de Septiembre. El hotel dispone de acceso WIFI gratuito en las zonas nobles. También en las habitaciones con tarifas diarias y semanales.
La Iglesia de Sant Romà es una de las paradas obligatorias durante los paseos por el centro. Una huella de arte modernista, construida en el estilo gótico catalán, dotada de elementos de fortificación.