Las experiencias en cada puerto van a ser inolvidables. Y es que además de disfrutar de las actividades y comodidades que te ofrece el crucero y su tripulación durante los días de navegación, las paradas en los puertos más interesantes van a ser parte de la aventura. Ciudades monumentales, repletas de vida y patrimonio te darán la bienvenida.
Este monumento simbólico de la ciudad portuaria de Tesalónica es uno de los lugares que hay que visitar sí o sí, ya que es uno de los lugares más representativos y además se ubica en el puerto de la ciudad. Esta torre fue construida en la época Otomana y cuando se construyó efectivamente la torre era blanca. Actualmente ya no lo es por el paso del tiempo, pero su estructura y situación siguen inalterables.
A muy pocos metros de distancia de la Torre Blanca se encuentra el Museo Arqueológico de Tesalónica, también cerca del puerto. Este museo es uno de los más importantes del país ya que cuenta con obras de arte y piezas arqueológicas con más de 20 siglos de historia. El museo expone desde el ‘Oro de los Macedonios’ hasta restos de las antiguas ciudades en la Edad de Hierro. Visitar este museo será como pasear a lo largo de la Historia para conocer el pasado de esta parte del mundo.
Esta importante iglesia dedicada a San Demetrio, es uno de los santuarios más importantes de la ciudad, primeramente, por su historia y segundo por sus interesantes mosaicos que se encuentran en su interior, obras de arte de valor incalculable.
La plaza de Aristóteles es uno de los ejes neurálgicos de la ciudad de Tesalónica. Esta enorme explanada con vista al mar y muy cerca del puerto es uno de los lugares que todo visitante tiene que conocer si viaja hasta aquí. La mayoría de eventos que se celebran en la ciudad se llevan a cabo en esta enorme plaza, desde los mítines políticos hasta los eventos navideños y fiestas tradicionales.