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Conoce Rías Baixas como la palma de tu mano

Cuando pensamos en Rías Baixas, muchos, me incluyo el primero, imaginamos ríos de vino blanco surcando entre colinas verdes. Y no todo es así. Hay mucho vino, claro, de aquí salen los mejores albariños y godellos. Pero las Rías Baixas comprenden una región que engloba tradición, cultura, gastronomía y unos paisajes únicos. Tengo la oportunidad de visitarlo de forma habitual y he querido hacer una breve guía con los que son para mi los hot spot más relevantes de esta zona, que va de la Ría de Vigo hasta la de Arousa.

Vigo modernista

Vigo concentra algunos de los mejores ejemplos de edificios novecentistas, modernistas y eclécticos. Aquí dejo una selección para todos aquellos que queráis haceros una miniruta: Casa Mulder (Montero Ríos, 22), Edificio Bonin (Oporto, 2), Edificio Simeón (Doctor Cadaval, 2), Edificio de Camilo y Benigno Fernández (Urzaiz, 28) y Banco de Vigo (Policarpo Sanz, 1).

Castro de Santa Tecla

Hace más de dos mil años, nuestros más lejanos antepasados ya fueron capaces de verle las virtudes a toda esta zona próxima a las Rías Baixas. Tenemos la suerte de saberlo a través de multitud de asentamientos situados en montes y colinas próximas al mar. Probablemente, el más espectacular y reseñable sea el de Santa Tecla, en A Guarda. Una fortificación que domina todo el río Miño y que, como curiosidad, podemos relacionar con la romanización del territorio, en torno al siglo I A.C. Si os gusta la historia, es un destino que no podéis dejar pasar por alto.

Parque Nacional de las Islas Atlánticas

Y de la costa, nos desplazamos directamente al mar y al conjunto de islas que forman el Parque Nacional de las Islas Atlánticas. Cuando visité Ons, Cíes, Sálvora y Cortegada no me lo podía creer, es un verdadero tesoro nacional, con su fauna autóctona y su vegetación, prácticamente virgen. Viviréis una experiencia única. Acantilados, playas de arena caliza, aguas cristalinas y un pequeño secreto, sus famosas furnas, cuevas marinas escondidas en los lugares más insospechados que podáis imaginar.

Cascada del Río Barosaa

Los americanos tienen la famosa Casa de la Cascada, construida por Frank Lloyd Wright, en Pennsylvania, uno de los grandes hitos de la arquitectura del siglo XX. Y nosotros, a la manera popular y enxebre que tan bien caracteriza a los gallegos, la Casa de la Cascada del río Barosa, entre Caldas y Pontevedra. Un paraje idílico enclavado en el Parque Natural del Río Barosa. Todo el recorrido tiene a cada lado diferentes molinos de agua, hasta catorce podréis encontrar, dándole un aire muy especial y singular. Por último, destacar que en verano la zona es perfecta para darse un chapuzón y comer en los merenderos próximos.

Balneario de Mondariz

No sé si os pasa a vosotros, pero yo cada vez que veo escrito balneario, pienso en el misterioso cuento de Carmen Martín Gaite, también, claro está, en la película de Visconti, Muerte en Venecia. Los balnearios siempre me llevan a otras épocas, pero no es necesario que viajéis en el tiempo para disfrutar de sus bondades. Hoy día son uno de los principales reclamos de pueblos del interior. Galicia cuenta con muchos y variados, aunque el de Mondariz es el más popular. Fue inaugurado hace más de un siglo, en 1873 y desde aquel año es un referente, no solo por sus aguas termales, sino también por los servicios que da. Aquí se celebran desde congresos hasta fiestas multitudinarias, es absolutamente imprescindible.

Ría de Arousa: Cambados, O Grove, Sanxenxo

Fariña, la serie de televisión que ha dado visibilidad a la Ría de Arousa en todo el imaginario contemporáneo, ha conseguido que muchos conozcan algunos de los pueblos más bonitos de toda España. Me voy a detener brevemente en tres que me gustan especialmente. Cambados, que es la cuna del albariño y que cuenta con un bar en cada esquina, es uno de ellos. En Destinia Magazine ya os hablamos hace un tiempo de todas sus virtudes. ¿Más? O Grove y su fiesta de exaltación del marisco y las playas de Sanxenxo, una de las localidades españolas que mayor número de banderas azules acumula.

Romería vikinga de Catoiras

A los gallegos, lo vais a comprobar rápido, les gusta mucho la fiesta y las celebraciones populares. Cada pequeña aldea tiene su particular homenaje a la gastronomía o a algún hecho del folclore. La romería vikinga de Catoira es de las más curiosas. Un buen número de vecinos se disfrazan de vikingos para conmemorar la defensa de sus predecesores ante las invasiones normandas de hace mil años. Todo se adereza con una buena sardinada, empanadas y gaiteiros. Os prometo que os haréis, rápidamente, seguidores de esta fiesta.

Museo de Pontevedra

Hay vida más allá de las pinacotecas más populares, sino que se lo digan a los pontevedreses, cuyo museo tiene hasta cinco edificios diferentes y un sexto en construcción: las ruinas de Santo Domingo y los edificios García Flórez, Fernández López, Sarmiento y Castro Monteagudo. Una suerte si os gusta el arte y la historia. Se pueden visitar la sala dedicada a Goya y Sorolla, las fotografías de Francisco Zagala, el conjunto de escultura religiosa o las piezas de orfebrería romana.

Hórreos y cruceiros en Combarro

Seguimos muy cerca de Pontevedra, a escasos seis kilómetros, se encuentra Combarro, una de esas villas marineras de postal donde parece haberse detenido el tiempo, sumadle que en el casco histórico hay repartidos más de 30 hórreos, construcciones de piedra y madera que se encargaban de guardar el grano. Ahora dan un aire atemporal a este pueblecito, al igual que los siete cruceiros que hay colocados estratégicamente. Si os fijáis bien, veréis que el lado de la virgen siempre mira hacia el mar y el del cristo a tierra.

Faro de Punta Robaleira

Y, por último, no podía dejar de mencionar uno de sus innumerables faros. Antaño servían de ayuda para que los barcos no se estrellaran contra las peligrosas rocas del litoral gallego. Éste del que os hablo fue construido en 1918 y se caracteriza por su tono rojizo y su forma achatada. Sus vistas a la ría son de las mejores que vais a encontrar. ¿Un secreto?, se dice que en las profundidades de la costa hay un pecio, reclamo de submarinistas y buceadores.

del panorama nacional e internacional (este año están invitados Delaporte o Viva Suecia, entre otros) para tocar en medio de los viñedos.

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